[custom_font font_size=”100″ line_height=”100″ font_style=”normal” text_align=”left” font_weight=”bold” text_decoration=”none” text_shadow=”no” color=”#1e73be”]
Emprendimiento desde el deporte
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El emprendimiento en su definición básica, se refiere a la capacidad que tiene una persona de hacer un esfuerzo adicional para alcanzar un objetivo trazado. El emprendedor va un paso adelante, se exige nuevos retos, va mas allá de donde ya ha llegado, renuncia al confort, se aventura como líder, empresario y acepta que no siempre gana, pero sí siempre se aprende.
Se vive como una opción real y decidida de hacer empresa y buscar de manera propia resultados importantes que satisfagan el desarrollo profesional, y de paso, la oportunidad de generar recursos que mejoren la calidad de vida propia y de su entorno.
Pero si nos metemos de lleno en el emprendimiento (hacia las empresas) en el deporte, también debemos tener en cuenta algunas consideraciones básicas que mueven la idea central de hacer negocio desde el movimiento deportivo.
El deporte tiene una serie de atractivas manifestaciones que concentran la atención de los aficionados, forma los valores que todos reclamamos, brinda espacios saludables, da oportunidades de hacer empresa y fomenta en las sociedades arraigos culturales. Todo un valor adicional que lo fortalece como sector visible, amplio en oportunidades y que genera grandes expectativas.
Es así como la actividad física es utilizada como gancho para transferir valores de productos o servicios mediante la comunicación, la cesión de derechos, el mercadeo y el patrocinio deportivo, entre otras posibilidades. El deporte es un producto de consumo permanente ligado a las empresas promotoras y patrocinadoras, que de una u otra forma trasladan su naturaleza a una industria con generosas oportunidades de negocio.
El emprendimiento por la empresa deportiva debe sustentarse en buscar diferenciales permanentes para un sector lleno de posibilidades, que con objetivos claros y rasgos propios, se puede llevar al éxito.
Pero para que ello ocurra el deporte debe verse como una gran industria del entretenimiento; se obliga reconocer en los aficionados clientes potenciales; se requiere generar contenidos y mensajes estructurados; promover la innovación y uso efectivo de los medios actuales de comunicación, así como formar los perfiles efectivos de los profesionales de la empresa para buscar las metas.
Y es que las manifestaciones deportivas están relacionadas con todos los sectores de la sociedad: economía, religión, política, educación, cultura, administración pública, turismo y desarrollo social. Es tal vez por esta razón que el deporte cada vez ha alcanzado un escalón más alto dentro de la opinión.
[image_with_text_over icon=”fa-paperclip” icon_size=”fa-2x” title_tag=”h3″ image=”19179″ image_shader_color=”rgba(30,115,190,0.32)” icon_color=”#ffffff” title_size=”Consejos para Navegar ” image_shader_hover_color=”#1e73be” title=”Cifras en constante crecimiento” title_color=”#ffffff”]Las cifras exuberantes en lo económico, que se manejan desde los derechos deportivos, las transacciones de los deportistas, las notables audiencias presencialmente y a través de los medios de comunicación, el mercadeo, y la tecnología, además de la idealización de los grandes protagonistas deportivos dan cuenta del impacto de esta actividad.
Su crecimiento, organización, generación de expectativas, opinión y promoción como una verdadera industria, provoca un movimiento en las masas con reacciones incalculables por ejemplo ante el triunfo o la derrota. La globalización y la fortaleza de los medios de comunicación para llevar los mensajes deportivos en el mundo ha permitido acrecentar su poder de acción.[/image_with_text_over]
Circunstancias económicas en el desarrollo del deporte
El deporte por historia y tradición, siempre ha estado vinculado como un sector de influencia para las sociedades. Eso significa que requiere de la atención en procesos como la inversión social para el caso de los gobiernos, así como de búsqueda de recursos y ganancias cuando se habla de un negocio o una industria.
La actividad física se ha convertido en un producto de consumo en todas las sociedades. En la economía moderna no ha escapado a los procesos de mercantilización, en los que se envuelve cualquier acontecimiento social, y el deporte lo es.
Cada vez más el deporte adquiere una relación con la economía presentando resultados como una de las grandes industrias del mundo. El marketing, los negocios, las transacciones, el espectáculo le han dado una dimensión al deporte, que lo han convertido en un atractivo punto de referencia.
[image_with_text_over icon=”fa-paperclip” icon_size=”fa-2x” title_tag=”h3″ image=”18849″ image_shader_color=”rgba(30,115,190,0.32)” icon_color=”#ffffff” title_size=”Consejos para Navegar ” image_shader_hover_color=”#1e73be” title=”Una gran opción de negocio” title_color=”#ffffff”]La práctica de un deporte o la celebración de un espectáculo deportivo, requieren de toda una serie de servicios y equipamientos que son precisos cubrir. Todo ello genera un conjunto de flujos económicos que es preciso medir.
Es ahí cuando hablamos de la economía del deporte o la industria deportiva, con variables que pasan empresas de recreación o entretenimiento; servicios profesionales en torno del deporte, proveedores de elementos para su práctica y finalmente, el alto rendimiento.
Todas estas son manifestaciones del deporte como empresa, que sustentan una economía de alto impacto, generadora de oportunidades y utilidades para todo tipo de gusto.[/image_with_text_over]
Practicando un deporte o asistiendo a un espectáculo deportivo el hombre satisface una necesidad. Surge por tanto una demanda a la que el sector del deporte asociado y las empresas han tratado de responder.
Las federaciones, las entidades deportivas y las instituciones públicas, se han encargado de ofrecer la práctica deportiva. Los clubes profesionales, las cadenas de televisión y los demás medios de comunicación, se han ocupado de la existencia y difusión de los espectáculos deportivos.
